El niño astronauta

               

              

  Hoy te contaremos la aventura de un niño como tú, que tenía un sueño muy grande, su nombre es Roberto.

Nuestro amigo antes de dormir siempre miraba por la ventana, vestía  su pijama de astronauta, su gorro con forma de casco, tomaba su pequeño telescopio y miraba una a una las estrellas en el cielo, sentía el infinito y fantaseaba el cómo sería el estar ahí, pisando las estrellas, flotando en el espacio sin gravedad… Se dormía imaginando y pensando en que alguna vez cumpliría su sueño.

Un noche mientras miraba las estrellas, vio que algo se acercaba justo en su dirección, era muy brillante,  cada minuto que pasaba ese extraño objeto parecía hacerse más grande, hasta que de pronto ¡PUM! , ¡Algo del espacio había caído en su patio!

Fue corriendo lo más de prisa que pudo, corrió y corrió… al llegar ve una compuerta que se abre, y de su interior un pequeño y delgado individuo se asoma, su color de piel era como un arcoíris, tenía 3 ojos, 4 brazos, y su pelo tenia forma de corazones… ¡era un extraterrestre!.

El asustado niño se ocultó detrás de un árbol, y trato de que no lo viera, sin embargo de pronto se le escucho decir:

-          Yo poder ver a tu, por favor, no asustar, yo no querer dañar tu – dijo el visitante, con un español muy malo.

-          ¿me puedes ver? ¿pero cómo?

-          Yo tener lentes que ver solo personas, también ver tus padres dormir estar.

-     Hablas muy raro – dijo Roberto saliendo de su escondite 

-    Yo intentar hablar mejor, tu enseñar por favor, mi llamar Yergon 1

Y fue así como siguieron conversando, Yergon 1  le cuenta  que cayó en su patio al perder su ubicación, necesitaba una brújula para poder retomar su viaje, y un par de herramientas para reparar su nave.  Por suerte ambas cosas el niño las usa con regularidad y están en su dormitorio listas para ser usadas.

-          Tú venir conmigo, yo mostrar espacio y mi planeta.

-          No puedo, mis padres se preocuparán mucho si no estoy. –Dijo con voz de pena Roberto

-          Yo entender, padres cuidar y amar mucho a tú, pero no preocupar, yo entregar esto para hablar tú y yo siempre, y mandar fotos de donde vivir. Cuando tu ser más grande yo volver y dar paseo.

Dicho esto le entrego un súper teléfono extraterrestre para poder estar comunicados, se dieron un abrazo y volvió  a su planeta.

Desde esto ya han pasado 15 años, hoy es el cumpleaños número 20 de Roberto.

Se han mantenido en contacto todos los días, incluso se han mandado fotos de sus padres.

Acordaron en que hoy el viene y se van de paseo por el fin de semana a su planeta.

Nuestro amigo en estos momentos mira las estrellas muy ansioso. A lo lejos ve una luz poderosa y brillante que se acerca a su patio y ¡salta de felicidad!, pues su compañero ya viene en camino.

Por fin se cumplirá el sueño de Roberto, ya es hora de una nueva aventura… y esa te la contaremos más adelante.

*****FIN*****

Y colorín colorado, este cuento se ha acabado, y mami esperará un momento para contarte otro cuento.

Autor: Joel Romero

Fecha: 11/07/2017

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